Por endi.com Ambientalistas preocupados por la conservación de la flora nativa denunciaron que un insecto conocido como la Sericocera krugii, una especie de avispa de orden primitivo, está destruyendo los robles y otros árboles autóctonos. Miguel Vives, miembro de la Liga Ecológica de Quebradillas, narró que la presencia del insecto se confirmó en ese pueblo cuando un joven encargado del mantenimiento en los merenderos de El Guajataca notó que algo raro le pasaba a las uvas playeras. Vives explicó que las hojas de la planta parecían masticadas y se detectó en las mismas la larva de la Sericocera krugii, que según el doctor José Mari Mutt es una avispa de orden primitivo y que fue encontrada procreándose en la citada zona costera. “Las avispas son de pocos milímetros y podemos confundirlas con las moscas. Las larvas crecen hasta una pulgada y son muy voraces. Después de consumir las hojas del árbol lo llenan de crisálidas oscuras, dándole al árbol una apariencia de tronco verrugoso”, dijo Vives. “Hace muy poco tiempo apareció una plaga en los robles de país. Las hojas jóvenes se arrugaban llenándose de unas ampollas y verrugas .El examen de las mismas dio origen a una nueva especie de piojos de planta llamada Holopothrips tabebuia”, explicó a Caza Noticias de ELNUEVODIA.COM el profesor quebradillano. “Su epíteto viene de que los robles del trópico pertenecen al género tabebuia y ya se propagó por toda la isla. Muchos creen que vino en las importaciones que hacemos de otros robles como los amarrillos o el plateado”, puntualizó Vives. Agregó que Juan Ricard, profesor estudioso de nuestra flora, también encontró la plaga en el Bosque de Maricao, invadiendo a nuestra especie endémica Roble Cimarrón y en el Karso lo hemos visto en el Roble de Trejo. Al presente se desconoce si existe algún plan de mitigación desarrollado por el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales u otras entidades gubernamentales para combatir la citada plaga.