Mucho ojo con la demencia

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Por Mildred Rivera Marrero / mrivera1@elnuevodia.com endi.com Un estudio en el que participan 2,000 personas de 65 años o más que viven en Bayamón ha revelado un cuadro preocupante respecto al nivel de demencia en esa población. Ivonne Z. Jiménez, investigadora principal y directora del Programa de Adiestramiento en Geriatría del Recinto de Ciencias Médicas, reveló algunos hallazgos preliminares: La prevalencia de demencia, o cantidad de personas de ese grupo diagnosticados con ese trastorno, es 11%. Esa es la proporción “más alta que ha salido en todos los países, aunque compara con Cuba y República Dominicana”, explicó Jiménez. La investigadora explicó que ese grupo de 2,000 personas es parte de un gran estudio que se hace a nivel internacional y que se conoce como “Alzheimer Demential International 10-66”. En el Caribe, se hace aquí, en Cuba y República Dominicana, y en Latinoamérica participan: Argentina, Brasil, Perú y Venezuela. También están India, China, Rusia, Suráfrica y Nigeria. Cada país escogió un sector particular para estudiarlo. Aquí se eligió Bayamón porque hay una buena representatividad de toda la población, aunque Jiménez aclaró que los resultados no se pueden extrapolar al resto del País. Otros hallazgos revelan que: # Uno de cada cinco participantes tiene historial de demencia en su familia. # El 21.5% del grupo tiene historial de depresión, ya que uno de cada cinco estuvo deprimido. # El 22% había tenido diagnóstico de depresión. Al mirar hacia los hábitos alimentarios de estas personas, se encontró un patrón de alto consumo de carnes rojas y bajo, de pescado. Ninguno de los participantes come pescado todos los días, y aunque un 76.4% dijo que lo consume algunos días, eso se queda corto al compararlo con el consumo de carne. “¿Qué importancia tiene esto? Que hay una asociación entre comer mucha carne roja y la demencia, y otra asociación entre comer mucho pescado y tener la mente clara”, sostuvo Jiménez. “Un 92% nunca come marisco. En cuanto a frutas y vegetales, casi un 9% nunca las come. Nuestra dieta no es la mejor para evitar la demencia”, agregó. Respecto a otras condiciones de salud que pudieran influir en el desarrollo de demencia, el cuadro tampoco pinta bien. # Un 69% tiene alta presión. # Un 29.6% tiene diabetes. “Este por ciento es el más alto que se ha visto”, dijo Jiménez, y aclaró que estas dos condiciones son factores de riesgo si no están controladas. # Un 25% tiene condiciones cardiacas. # Un 7.5% ha tenido un accidente cerebrovascular (derrame), que se relaciona mucho con el desarrollo de demencia a largo plazo. “Hemos encontrado mucho colesterol elevado, hallamos una asociación entre la falta de ácido fólico y más problemas de demencia en este grupo, lo cual coincide con lo que se ha publicado ya”, dijo la también internista. Los hallazgos preliminares son producto de la primera fase del estudio, que incluyó entrevistas y pruebas neurosicológicas y pruebas de laboratorio. También se hicieron pruebas genéticas, pero aún no tienen los resultados. En una próxima etapa, el grupo de investigación visitará nuevamente a los participantes para ver si han surgido nuevos casos de demencia, y analizar qué factores de riesgo han influido más. Posteriormente, Jiménez se propone hacer un proyecto educativo para los cuidadores. “Para enseñarlos a manejar estos pacientes de manera que no se afecten”, dijo. Esto es así porque el estudio internacional, iniciado por el investigador Martin J. Prince, del Instituto de Siquiatría de la Universidad de Londres, no tiene una fecha para concluir. El proyecto, en el que han participado más de 40,000 personas, según publicado, continuará indagando el problema de la demencia. “Ellos buscan la prevalencia de la demencia para ver qué factores de riesgo hay en cada país, que sea más o menos común”, dijo Jiménez. El estudio se hace en países que tienen ingresos medianos y bajos, donde se estima que viven dos terceras partes de las personas con demencia en el mundo. Como se espera que esa proporción aumente en las próximas décadas, la idea es ayudar a desarrollar medidas sociales y sanitarias para que puedan enfrentar esa realidad, según se ha publicado. Jiménez señaló que a nivel de la Isla “lo que queremos es crear consciencia de la cantidad tan grande de personas que tenemos con esta enfermedad, de la necesidad de cuidado médico y de la falta de apoyo que hay para los cuidadores. Quisiera llamar la atención en términos de cómo podemos asignar más recursos al estudio de esta enfermedad, para hacer una detección y tratamiento temprano y sobre todo hacer prevención de todos eso factores de riesgo”.