Salamanquesa y no salamandra

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Por Juan Diego Daza / Especial para El Nuevo Día Citado de endi.com En Puerto Rico existen nueve especies de un tipo de lagarto que localmente se conocen como salamandras. De estos, los más populares son aquellos traslúcidos, que salen en las casas por las noches a alimentarse de insectos, atraídos por luces brillantes. Pero la verdad es que no todos los que habitan la isla de Puerto Rico son translúcidos, y ninguno de ellos es una verdadera salamandra. Es curioso que estos animales tan frecuentes en ambientes urbanos, se conozcan por un nombre que pertenece un grupo de anfibios. Dado que mi estudio se basa en este grupo de lagartos, busqué el origen de esta confusión que está tan arraigada en el idioma. Mi primer intento fue en la computadora. Si escribo la palabra salamandra en el procesador de palabras Word y luego le doy el comando para sinónimos, los tres primeros que obtengo son: lagartija, salamanquesa y animal acuático, eso sin mencionar el sexto, que causaría aún mas confusión (ésa la dejo para los más curiosos). Obviamente, el error fue incorporado al procesador de palabras, pero resulta que los dos primeros sinónimos, son términos biológicamente mas correctos para los lagartos translúcidos. Mi segundo intento fue con el Diccionario de la Real Academia Española. Según éste, Salamandra viene del griego y se refiere a un anfibio de unos 20 centímetros de largo, piel lisa, de color negro y con muchas manchas amarillas, definición basada en la salamandra de fuego, un animal que vive en los bosques montanos de Europa, Asia y África. Plinio el Viejo, en uno de sus volúmenes sobre Historia Natural, escribió sobre la salamandra que era un animal tan intensamente frío que podría extinguir el fuego al contacto. Era común que la gente de la Europa antigua relacionara estos animales con el fuego. Las salamandras usan troncos huecos como sitio de hibernación, la gente al arrojarlos al fuego hacia que las salamandras despertaran y comenzaran a segregar una sustancia lechosa por la piel, la cual era interpretada como un extintor de fuego. Es obvio que estos anfibios difieren bastante de lo que se conoce localmente como salamandra. El termino salamanquesa es obviamente una alteración de salamandra, pero que se aplica exclusivamente a estos reptiles. Geco por su parte se origina de ge'kok, la cual en uno de los lenguajes malayopolinesios representa los sonidos que hace una de las especies. Las salamanquesas, a diferencia de las salamandras viven virtualmente en todas las zonas tropicales del mundo. En el Caribe, hay una alta biodiversidad y especies únicas en el mundo. Por ejemplo las islas de Mona, Monito y Desecheo, cada una cuenta con propia especie de salamanquesa. Otra característica importante de las salamanquesas es el tamaño reducido que algunas especies pueden alcanzar; en República Dominicana existe una especie cuyo cuerpo mide sólo 16 milímetros, un poco menos que el diámetro de una moneda de 10 centavos.