Llega agosto y con éste el regreso a la escuela. Alrededor de Puerto Rico, estudiantes inician un nuevo año escolar con la certidumbre de que éste traerá nuevos conocimientos que los formará como seres humanos, y los acercará a oportunidades educativas y profesionales. ¿Está nuestro sistema educativo cumpliendo con esas expectativas?

Desafortunadamente, la evidencia demuestra que desde hace décadas (y varias administraciones) el gobierno le está fallando al pueblo en lo que respecta a la educación escolar.

En el más reciente episodio de la serie “Puerto Rico Vota Con-Ciencia”, preparada por Enrique Vargas para Ciencia Puerto Rico, los candidatos a la gobernación presentan sus propuestas para mejorar el desempeño y aprovechamiento de nuestros estudiantes en ciencias y matemáticas. A continuación, compartimos el contexto y trasfondo que informan la pregunta realizada a los candidatos.

(Enlace directo al audio.)

Desde que en 2009 se empezó a administrar la última versión de las Pruebas Puertorriqueñas de Aprovechamiento Académico (PPAA), las puntuaciones de aprovechamiento en matemáticas de estudiantes de escuela pública han estado por el piso. En el 2015, sólo un 5% de los estudiantes de grado 11 resultaron proficientes en matemáticas. En ciencias, un 39% de estudiantes de grado 11 alcanzaron un nivel de aprovechamiento satisfactorio.

Dos administraciones y siete años de propuestas, medidas e iniciativas para mejorar el desempeño escolar no han tenido gran efecto. Las puntuaciones actuales reflejan el más mínimo de aumento desde el 2009 cuando la proporción de estudiantes proficientes en matemáticas de grado 11 era 2%.

Al comparar el desempeño de estudiantes puertorriqueños con otras jurisdicciones de los Estados Unidos, e inclusive con otros países de Latinoamérica, la falla educativa es igualmente de evidente. En las pruebas de matemáticas del Centro Nacional de Estadísticas Educativas, Puerto Rico está en la última posición entre todas las jurisdicciones y estados de los EEUU en aprovechamiento en matemáticas—menos del 0.5% de los estudiantes de cuarto y octavo grado obtuvieron puntuaciones proficientes.

Y en las últimas pruebas internacionales del Programa de Valoración Internacional del Estudiante (PISA, por sus siglas en inglés) Puerto Rico obtuvo puntuaciones promedio por debajo del promedio de países en América Latina, ocupando la posición 58 de 65 países evaluados. Cabe notar que las pruebas PISA incluyen una muestra de estudiantes de escuelas públicas y privadas, indicando que el sistema de educación privado también podría mejorarse significativamente.

Las pruebas estandarizadas tienen sus críticas pero nadie disputa que las mismas proveen una manera de diagnosticar posibles áreasde mejora, identificar tendencias y comparar el desempeño de Puerto Rico preparando sus estudiantes ante un marco global.

No podemos tapar el sol con un dedo. El sistema de educación de Puerto Rico necesita atención y cambios. Los ha necesitado por un buen tiempo y nada se ha hecho al respecto. Una buena educación en ciencias y matemáticas no solamente capacita a futuros ingenieros, científicas e innovadores, sino que también es esencial para la formación de nuestros ciudadanos y su desempeño como profesionales, sea cual sea la carrera que elijan.

Ante este panorama, ¿qué proponen hacer los candidatos a la gobernación al respecto?

Este año tenemos la oportunidad de tomar acción para mejorar nuestra situación como país, demandando que los candidatos presenten visiones informadas y bien razonadas sobre el futuro de la educación en Puerto Rico. Y tenemos también la oportunidad de tomar nota para que rindan cuentas después.

Este semestre, mientras nuestros niños estudian sus materias asignadas, estudiemos nosotros la materia que nos corresponde como ciudadanos: el futuro de nuestra gobernación.

La autora es directora ejecutiva de la organización sin fines de lucro Ciencia Puerto Rico y directora de la Iniciativa Yale Ciencia en la Universidad de Yale.

Publicado originalmente en El Nuevo Día.