No debe ser una sorpresa que los sapos no gozan de mucha popularidad. Sin embargo, es importante notar que en Puerto Rico amamos al coquí, que es un anfibio endémico. Aun así, cuando se habla sobre la conservación del sapo concho, muchas personas se retuercen con asco y se preguntan por qué se quiere proteger a un sapo tan feo. Esta reacción se debe en parte a que están confundiendo al sapo concho con el sapo común y es muy probable que nunca hayan visto a un sapo concho en persona.