Jessica se levanta temprano para dirigirse al Mercado Agroecológico del Viejo San Juan. Como todos los sábados, llega en su guagua desde Aibonito, con los productos de su proyecto agrícola, “Finca Escondida”. 1h y 23 minutos de camino. 45 millas aproximadamente. Por fin llega y coloca su kiosquito. Estará ubicada en el paseo de 8 de la mañana a 12 de la tarde. Su variedad de productos incluye pimientos, cilantrillo, recao, tomates, queso de cabra, huevos de gallina, jugos naturales, lechuga, col kale… Todo ecológico, sembrado y cosechado con sus manos, directo de su finca. A eso de las 8:25 ya no le quedará ni una sola docena de huevos. La crisis de los huevos de gallina es grave en este país. Yo llegué a las 11am.
Desde 1898, casi 50 huracanes –en promedio, uno cada dos años– han afectado a Puerto Rico. Aunque, muchas veces, estos disturbios se tratan como sorpresivos, la realidad es que los números plasman cuán rutinarios son y por qué es necesario que el país sea cada vez más proactivo para estar mejor preparado ante su ocurrencia.
A tres años del comienzo de la pandemia de COVID-19, nos encontramos en un punto de inflexión. El panorama es mucho más alentador que al principio, gracias a esfuerzos salubristas y comunitarios, la vacunación y los tratamientos disponibles, entre otros.
Investigadores censaron hasta 3,000 individuos a través de 21 años y comparten sus hallazgos
Manatí - Un estudio científico –que se extendió por 21 años– reveló que los árboles palo de pollo en el humedal costero de Sabana Seca, en Toa Baja, solían crecer en un espacio que, en años anteriores, estaba lleno de agua que era más dulce que la salada que hay ahora.
Con una carrera impecable y más de 40 años de experiencia, la doctora Ivette Perfecto se ha destacado en el desarrollo de estudios agroecológicos, con investigaciones enfocadas en la dinámica y el funcionamiento de los ecosistemas, así como la aplicación de teorías ecológicas en los sistemas agrícolas, las cuales han sido de gran relevancia para la comunidad científica internacional.
Investigadores de la Universidad de Puerto Rico (UPR) estudiaron restos fecales momificados (coprolitos) de dos culturas precolombinas extintas que habitaron en la isla y, al compararlos con muestras de comunidades nativas que aún existen y urbanas en otras partes del mundo, encontraron que la diversidad de hongos microscópicos (micobioma) en los intestinos de los primeros pobladores era menor que en los actuales.