Por Frances Rosario / end.frosario1@elnuevodia.com endi.com “Hay manera de impactar para reducir el consumo de energía eléctrica y para reducir nuestra generación de carbono en esta lucha que llevamos para evitar el calentamiento global”, sostuvo el presidente del Senado, Kenneth McClintock, quien convocó la Cumbre Ambiental sobre Energía y Calentamiento Global. El líder senatorial comentó que realizó el foro para orientar a los legisladores sobre el tema y buscar ideas para crear legislación que redunde en la protección del ambiente. Sin embargo, no hubo ningún ambientalista en el foro. Ni siquiera fue invitado el reconocido asesor ambiental del Partido Independentista Puertorriqueño, Jorge Fernández Porto, quien se sentó entre el público. Algunos de los presentes fueron los alcaldes de Manatí, Juan Aubín Cruz Manzano y el de Caguas, William Miranda Marín; la presidenta de Bloques Carmelo, Melba Figueroa; el presidente de la Asociación de Constructores de Hogares, Adolfo González; el director de la Autoridad de Desperdicios Sólidos (ADS), Javier Quintana, así como el presidente de la Junta de Calidad Ambiental, Carlos López. Uno de los puntos más destacados es la falta de conciencia en los puertorriqueños para tomar medidas pro ambiente, como por ejemplo, cambiar bombillas incandescentes por fluorescentes para ahorrar energía. De hecho, McClintock dijo que a finales de la semana podrían estar radicando un proyecto para dar cupones de $1.50 para que se cambien al menos dos bombillas de cada hogar. El costo al Gobierno sería de $3 millones, mientras que el ahorro energético para el verano sería de 146 megavatios. Por otro lado, el Alcalde de Caguas criticó a la Oficina de Energía de ADS. Dijo que no es funcional porque “no tiene recursos para resolver los problemas energéticos del País”. Los panelistas coincidieron en que para resolver el problema energético y de disposición de desperdicios sólidos es necesario una planta de conversión de energía (‘waste to energy’). “Esencialmente, las tecnologías que desaparecen la basura, cambian el vertedero del piso al aire, amén de que acaban con un montón de cenizas que tienes que enterrar como quiera. En vez de contaminar una comunidad, contaminas a todo el mundo. Es la democracia de los desperdicios en acción”, criticó Fernández Porto.