Ciencia para la reconstrucción y prosperidad de Haití

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Por Mónica I. Feliú Mójer / Ciencia Puerto Rico

El terremoto del 12 de enero de 2010 causó devastación sin precedentes en la infraestructura y las instituciones sociales, educativas, económicas y ambientales de la República de Haití.

A casi dos años del siniestro, Haití hace la transición hacia su reconstrucción a largo plazo. Con este propósito, el gobierno de Haití—así como organizaciones humanitarias y agencias internacionales—han delineado informes y planes para guiar la recuperación, el progreso y la prosperidad de Haití luego del terremoto.

Sin embargo, un escaso número de estos documentos sopesan la importancia que las ciencias y la educación científica pueden y deben tener en el futuro de Haití. Por esto la Asociación Americana para el Avance de las Ciencias (AAAS, por sus siglas en inglés)—bajo el liderato de su división caribeña y su presidente, el Dr. Jorge Colón Rivera, profesor de Química de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras—convocó a científicos y educadores de Haití y la diáspora haitiana; a científicos internacionales y a expertos en política pública, y desarrolló el informe titulado Ciencia para Haití (Science for Haiti).

Ciencia para Haití enumera recomendaciones y objetivos estratégicos para propulsar las ciencias y la educación científica en Haití. Entre éstos se destacan el aumentar el alfabetismo científico; vincular el avance de las ciencias en Haití con la satisfacción de las necesidades del país; y desarrollar la capacidad y el peritaje de los científicos haitianos. Además, el informe enfatiza el establecimiento de una política pública científica nacional y el apoyo gubernamental al avance de la capacidad científica y al desarrollo de las instituciones de educación superior e investigación.

Retos y oportunidades

Haití es el país más pobre del hemisferio occidental. Más de la mitad de su infraestructura educativa, económica y administrativa fue destruida por el terremoto. Además, el terremoto agravó la crisis humanitaria que ya vivía el empobrecido país.

De cara a tan monumentales desafíos, ¿por qué debe la ciencia ser una prioridad en Haití? El conocimiento científico es vital para el progreso de cualquier país. En particular, el avance de la ciencia, la tecnología y la innovación en Haití podría proveer soluciones prácticas a sus problemas más apremiantes.

Por ejemplo, el desarrollo científico y tecnológico podría ayudar a mejorar el cuidado de la salud y el acceso al agua potable en Haití, en donde el 2% de la población es positiva al virus de inmunodeficiencia humana (VIH); y sobre un tercio de la población carece de acceso a agua potable. La ingeniería y las ciencias terrestres podrían tener un gran impacto en la preparación ante desastres naturales como huracanes y terremotos. Mediante el desarrollo de una agricultura sustentable y un buen manejo de los recursos naturales, la ciencia podría ayudar a reducir la malnutrición y el hambruna en Haití.

Necesario para el desarrollo de la capacidad científica de Haití es el desarrollo de la educación científica del país. No solamente la educación formal y el desarrollo profesional de los científicos haitianos es vital. Para que la ciencia, la tecnología y la innovación catalicen la recuperación y el progreso de Haití, es importante que todos los niveles de la sociedad haitiana entiendan su importancia y aplicaciones.

Finalmente, el avance de la ciencia haitiana es un vehículo para proteger derechos humanos fundamentales como el derecho a la educación; el acceso a agua potable, alimento y techo; el derecho a la salud; y el derecho a la protección de la vida ante desastres naturales.

Clave para la reconstrucción, el progreso sustentable y la prosperidad científica de Haití es que esta gesta sea liderada y dirigida por los haitianos, con el apoyo de la comunidad regional e internacional.

Iniciativas para el adiestramiento de educadores y científicos haitianos, como la recientemente establecida entre la Universidad de Puerto Rico y la Universidad Estatal de Haití; y un reciente conversatorio entre representantes gubernamentales, miembros de AAAS y diversas organizaciones sin fines de lucro interesados en apoyar el avance científico haitiano, ejemplifican el tipo de colaboración internacional que puede ayudar a propulsar las ciencias en Haití.

La experiencia haitiana advierte sobre los peligros que podría enfrentar cualquier país ante un desastre natural de grandes proporciones. Además, resalta la importancia de establecer planes de manejo y mitigación informados por la realidad natural (i.e. geología y geografía) de un país; y de la educación participativa que permita a la población responder adecuadamente ante estos desastres y tomar parte en las decisiones para el desarrollo de un futuro sustentable.

Indudablemente, Haití encara numerosos retos. Sin embargo, no es el único país que recurre a las ciencias como herramienta de recuperación luego de una catástrofe. Luego del genocidio de 1994, Ruanda nombró a la ciencia, la tecnología y la innovación piezas claves para su desarrollo económico y social a largo plazo.

Ciencia para Haití presenta una oportunidad única para que los haitianos realicen su derecho a disfrutar los beneficios del progreso científico y sus aplicaciones; a mejorar significativamente su calidad de vida; y a un desarrollo económico y social sostenible. Queda de la comunidad internacional mirarse en el espejo de Haití, aprender de lo que ha sucedido en el hermano país y ofrecerle una mano amiga para juntos poder avanzar hacia un futuro más justo para todos sus habitantes.