Necesario un cambio cultural para la innovación

Este artículo es reproducido por CienciaPR con permiso de la fuente original.

PDF versionPDF version

Contribución de CienciaPR: 

No

Por: 

Marie Custodio Collazo / mcustodio@elnuevodia.com

Las empresas emergentes de tecnología son uno de los ejemplos más vivos de la economía del conocimiento, sin embargo, los atrevidos que ya se subieron a ese barco consideran que hace falta un cambio cultural para fomentar que más ideas se conviertan en negocios viables.

Ignacio Pino, presidente de CDI Laboratories -empresa de biotecnología puertorriqueña-, y Norman Ortiz, creador de iGenApps, compartieron sus experiencias como fundadores de “startups” en Puerto Rico ayer, durante un coloquio organizado por el consorcio Induniv como parte de las actividades que giran en torno a la feria Interphex en el Centro de Convenciones.

“Un emprendedor no debe estar llorando por obstáculos”, dijo Pino antes de enumerar algunas de las ventajas y desventajas que considera que tiene la Isla para las empresas emergentes de alta tecnología.

Más que repetir que en la Isla faltan inversionistas dispuestos a arriesgar capital en este tipo de negocios, ambos emprendedores llamaron la atención a que los puertorriqueños no piensan en traducir sus ideas en algo tangible.

En particular, Gilberto Márquez, asesor del Fideicomiso de Ciencia de Puerto Rico, apuntó que se debe derribar el mito en las universidades de que es malo comercializar el resultado de las investigaciones.

Ortiz señaló que el insularismo hace que muchas personas solo piensen en buscar soluciones a problemas locales, en lugar de pensar global, para que el negocio tenga el potencial de crecer.

El joven desarrollador también mencionó el conformismo y la falta de persistencia como actitudes que tienen que eliminarse para tener un ambiente más propicio para el emprenderismo tecnológico.

Otro elemento que suele ser recurrente en las conversaciones sobre “startups” es que la población debe ser más tolerante al fracaso, ya que muchas de estas empresas intentarán varias ideas antes de que una tenga éxito.

Para el Fideicomiso de Ciencia, dijo Márquez, el éxito se debe medir en números de empresas emergentes, patentes registradas, tecnologías comercializadas, contratos de investigación vigentes y empleos creados. Además de la exportación de productos o conocimiento.

Tags: