Salud adquiere laboratorio para atender emergencias biológicas y químicas

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Por Cristina del Mar Quiles (INS) La ubicación del laboratorio se mantiene secreta como medida de seguridad El Departamento de Salud de Puerto Rico adquirió el primer laboratorio de emergencias biológicas en la Isla y el Caribe, lo que permite una respuesta inmediata y adecuada ante situaciones de riesgo de salud pública y seguridad nacional. En la instalación, cuya localización se mantiene secreta a los ciudadanos como medida de seguridad, se ubicarán los servicios de laboratorio nivel de seguridad biológica 2 y 3, y laboratorio nivel químico 2. Esto significa que se podrán manejar localmente agentes de peligro moderado hacia las personas y el ambiente, tales como los virus de influenza y dengue, realizar análisis diagnósticos utilizando métodos tradicionales y técnicas moleculares, y realizar trabajos con agentes exóticos que pudieran tener consecuencias serias o letales en la población de no ser tratados con premura, como lo es el ántrax. También contará con equipos especializados para identificar sustancias químicas peligrosa, como lo son los compuestos orgánicos volátiles y metales pesados. Según detalló la subsecretaria de Salud, Concepción Quiñones de Longo, hasta ahora, muchos de estos procedimientos deben realizarse fuera de Puerto Rico, lo que resta tiempo para atender el problema y aumenta el riesgo a los ciudadanos. "Hay algunas pruebas que se han hecho el Laboratorio de Salud Pública, como las de influenza, pero todavía hay pruebas específicas, como las químicas, que cuando hay una amenaza en Puerto Rico, nuestro laboratorio solamente puede recoger las muestras y enviarlas a Estados Unidos y los resultados no se obtienen de inmediato, tenemos que esperar varias semanas", indicó la salubrista. "Cuando este laboratorio esté operacional, esperamos que los resultados preliminares se puedan obtener en un tiempo corto y los resultados finales, en vez de tomarse varias semanas, quizás se puedan tener en un tiempo corto", señaló. La instalación, desarrollada mediante una asignación de siete millones de dólares, formará parte de la Red de Laboratorios de Respuesta, lo que tiene el propósito de proveer una respuesta estandarizada ante una emergencia de salud pública. Quiñones de Longo recordó instancias en la que se evidenció la necesidad de establecer en la isla un laboratorio como este, como lo fue el inicio de la pandemia de la influenza AH1N1, "cuando no estábamos preparados porque el laboratorio estatal de salud pública no tenía la capacidad de hacer pruebas confirmatorias de influenza". Mencionó también la identificación del contaminante tetracloroetileno en pozos de agua comunitarios en los pueblos de Naranjito y Corozal para noviembre de 2010, exposiciones recientes a mercurio y casos de contaminación con plomo en Arecibo.