Por Milly Marie Vega Pérez y Javier Meléndez-Pineda / Prensa Comunitaria endi.com Las organizaciones sin fines de lucro pueden contribuir a la preservación de áreas naturales cercanas a sus comunidades mediante acuerdos de comanejo con el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA). “Aseguramos la conservación del área natural protegida porque los residentes empiezan a ser parte de ese centro y ya no sólo lo ven como un lugar aparte, sino como parte de ellos y que les puede traer beneficios económicos”, indicó Edgardo González, director del Negociado de Servicio Forestal del DRNA. Precisó que los acuerdos de la agencia con entidades sin fines de lucro son para colaborar en el manejo de áreas naturales protegidas, como bosques y reservas, aunque vislumbra la posibilidad de establecer acuerdos para manejar parques nacionales. El establecimiento de estos acuerdos cobró auge con el proyecto de autogestión comunitaria Casa Pueblo, que luchó desde 1980 para evitar que se llevara a cabo la explotación minera en Adjuntas, Utuado, Lares y Jayuya. Luego de que se descartó el proyecto de explotación minera, Casa Pueblo logró que se designara la zona como el Bosque del Pueblo y asumió la responsabilidad de administrarlo en 1996. No existe un esquema establecido para los acuerdos, por lo que éstos dependen de los intereses y recursos de la organización que los propone. González expresó que cualquier grupo que quiera sostener un acuerdo, primero debe organizarse y demostrar compromiso e interés. Luego, debe identificar recursos de apoyo con quienes puedan hacer alianzas, como universidades u otras entidades educativas, ambientales o culturales. Después de reunirse con el personal de la agencia, se formaliza la petición mediante una carta y se elabora un documento del acuerdo entre ambas partes, que luego se firma. “El Departamento ha comenzado a reconocer el espacio de las comunidades y el potencial que tiene este tipo de proyecto. No podemos seguir pensando que el Gobierno lo va a hacer todo. La comunidad es un actor importante. Los proyectos de comunidad van a seguir desarrollándose”, manifestó González. Sin embargo, los grupos comunitarios pueden confrontar problemas a la hora de cumplir con los pactos, reconoció Javier Almeyda Loucil, coordinador de Ciudadanos Pro Bosque San Patricio. Entre los retos mencionó la concienciación ciudadana sobre la importancia de vivir cerca de áreas conservadas.