Símbolo mundial celebra 50 años
Enviado el 12 agosto 2013 - 12:09am
Este artículo es reproducido por CienciaPR con permiso de la fuente original.
Contribución de CienciaPR:
Fuente Original:
Por:
Orgullo, entusiasmo y optimismo es lo que transmite Andrew Ortiz, gerente del museo del Observatorio de Arecibo, al analizar el impacto de los 50 años de historia de esta instalación para Puerto Rico y el mundo.
“Es un logro increíble no tan solo de Puerto Rico, sino a nivel internacional, porque este radiotelescopio, siendo el más grande del mundo, hace investigaciones que ninguno otro puede hacer”, comenzó por destacar ayer durante una entrevista telefónica, poco antes de que diera inicio el más reciente evento coordinado como parte de las celebraciones.
“Científicos de alrededor de todo el mundo aun quieren utilizarlo pues, a pesar de que son 50 años de historia, nuestras computadores, nuestros receptores, son lo último de los muñequitos”, presumió.
Ortiz explicó que el radiotelescopio se especializa o es líder del planeta en tres tipos de disciplinas: de radioastronomía, astronomía de radar y ciencias atmosféricas.
La primera permite estudiar la energía que los objetos celestes emiten naturalmente en forma de ondas de radio. Estas ondas llegan a la Tierra, aunque las personas no puedan percibirlas. “Nos permite determinar composición, distancias de objetos, estructuras, formaciones, (todo) basado en la energía que emiten”, dijo.
Un telescopio óptico permite estudiar el universo mediante el estudio de las ondas de luz visible que emiten los cuerpos celestes, pero en ciertos momentos, como cuando está de día, no es funcional. El radiotelescopio, en cambio, como no utiliza ni estudia energía visible y sí ondas de radio, funciona en todo momento para analizar las ondas que emiten los objetos celestes. Es una ciencia pasiva, según especificó Ortiz.
Otro tipo de estudio astronómico en el cual Arecibo es líder, es el que permite analizar planetas, cometas, asteroides y otros objetos más cercanos a la Tierra utilizando su eco. “Hasta los anillos de Saturno llegamos”, indicó Ortiz.
Esa modalidad, llamada astronomía de radar o planetaria, funciona transmitiendo desde el radiotelescopio una onda de radio que choca con los objetos y genera un eco con el que los científicos determinan su forma, velocidad y la distancia a la que están. De hecho, la NASA (National Aeronautics and Space Administration) delegó ese tipo de monitoreo al observatorio de Arecibo.
El radiotelescopio también fue descrito como un recurso extraordinario para estudios de ciencias atmosféricas. “Desde aquí podemos determinar, no solo la composición de las capas altas de la atmósfera, además podemos medir la cantidad del polvo del Sahara, radiación emitida en otro lado del planeta, cualquier cosa que ocurra en el planeta y sea transportada en la atmósfera, esos cambios sutiles independientemente de donde ocurran en la Tierra”, detalló.
Actualmente el observatorio de Arecibo es administrado por un consorcio integrado por la Universidad Metropolitana (UMET), SRI International y Universities Space Research Association.
Según se indica en su página electrónica, SRI International es un instituto sin fines de lucro que desarrolla investigación y desarrollo para entidades privadas o gubernamentales. En el 2012 sus ingresos fueron de $545 millones, aproximadamente.
Universities Space Research Association se describe como una corporación sin fines de lucro independiente, que une talento interno con recursos universitarios para desarrollar ciencia espacial y tecnología.
Ciencia para festejar
Como parte de las actividades para celebrar los 50 años de operación del observatorio o radiotelescopio de Arecibo, anoche se ofrecieron charlas sobre temas diversos. Por ejemplo, el profesor Abel Méndez, de la Universidad de Puerto Rico en Arecibo, habló sobre los planetas habitables. Además, se conversó sobre eventos astronómicos como la lluvia de meteoros Perseidas, que llega a su punto máximo hoy.
Los asistentes también pudieron realizar observaciones de una extensa nube de estrellas que forma parte del centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
Ortiz recalcó que científicos de Puerto Rico y de todo el mundo pueden solicitar hacer estudios en las instalaciones de Arecibo si someten sus propuestas para evaluación.
“Muchos dependen de la posición de la Tierra y del objeto (para elegir la fecha) pues, si no, habría que esperar años. A proyectos como esos se le da prioridad”, aclaró.
De otra parte, el itinerario de experimentos o estudios en agenda es público y puede verse en la página electrónica www.naic.edu.
Individuos o grupos que deseen visitar el lugar y realizar recorridos, deben llamar al (787) 878-2612 y marcar la extensión 346.