Truco hormonal para la reproduccion del sapo concho

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Por Gerardo E. Alvarado León / galvarado@elnuevodia.com endi.com Pocas personas lo saben, pero hace más de 20 años la reproducción del sapo concho es asistida por la inyección de hormonas que aceleran el proceso. Y no es que la intervención humana sea necesaria en el apareamiento de este anfibio endémico de Puerto Rico, sino que su población es tan reducida que los científicos “inundan” el medio ambiente con renacuajos para maximizar el número de organismos vivos. Fernando Bird Picó, herpetólogo de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, indicó que la técnica no se practica en la Isla porque aquí se dan las condiciones naturales para que el sapo concho se reproduzca sexualmente. En cambio, 16 zoológicos distribuidos en Estados Unidos, Canadá e Inglaterra están involucrados en el plan para salvar la especie y sí la ejecutan, precisó el científico. “El sapo concho macho es el que canta. Grabamos ese sonido y lo ponemos en el lugar donde ocurrirá el evento reproductivo. Los machos se activan y comienzan a vocalizar. La hembra lo escucha y recibe un estímulo, pero necesita otro que le diga que tiene que reproducirse (naturalmente es la lluvia y la baja presión barométrica). Cuando está lista fisiológicamente se le inyecta la gonadotropina, una hormona que estimula la producción de óvulos”, dijo. “Los huevos se producen en menos de 24 horas. La hembra se pone en un estanque con el macho y cuando ocurre el amplexus (abrazo sexual), ésta comienza a ovular. El macho siente las vibraciones y eyacula. La hembra pone los huevos y el macho los insemina. Después salen los renacuajos”, añadió. Vital la coordinación El también herpetólogo Juan A. Rivero, quien ha descubierto más de 100 especies de anfibios y reptiles, indicó que la estimulación debe hacerse en hembras y machos simultáneamente. “La hembra se inyecta y pone los huevos en cualquier época del año, pero hay un periodo reproductivo natural en el que el macho canta y la hembra acude a él. Sin coordinación no hay reproducción posible”, enfatizó Rivero. Miguel Canals, director de manejo del Bosque Seco de Guánica (único hábitat natural de la especie), detalló que los renacuajos son liberados en las charcas Tallonal en Arecibo, Gabia en Coamo y Manglillo Grande en Guánica. Precisamente, esta tarde llegan a la Isla miles de renacuajos procedentes de seis zoológicos de Estados Unidos. “Los criamos en charcas similares a donde se reproducen. No queremos mezclar sapos de laboratorio con los naturales. Pero hemos sido exitosos porque hemos visto adultos en los alrededores de estas charcas. Hasta se han reproducido”, sostuvo Canals.