El Puerto Rico Science Policy Action Network lanzó una petición el pasado 19 de marzo de 2020, para exigir la renuncia de la epidemióloga del Estado en Puerto Rico, la doctora Carmen Deseda, porque entendemos que la Dra. Deseda no posee el peritaje necesario en salud pública y epidemiología, y ha fallado en priorizar la ciencia y la evidencia en su toma de decisiones. A continuación reproducimos el texto de la petición. Al día de hoy (3/24/20), 185 personas han firmado la petición, de las cuales un 34% se identificaron como estudiantes graduados, 34% como profesionales con un PhD, Ms, MPH, Ms o DrPH y un 32% se identificó como otro (sector privado, sector público, contratistas, ciudadanos preocupados, etc.). Ver aquí para un listado de firmas.

Comunidad Científica exige la renuncia de la Dra. Carmen Deseda

La Dra. Carmen Deseda fue designada por el ex-gobernador Ricardo Rosselló como Epidemióloga del Estado en Puerto Rico en enero del 2017. Este puesto es responsable de proteger la salud de Puerto Rico mediante el monitoreo y control de las enfermedades y otros problemas de salud. Más aún, el puesto conlleva el valorar por encima de todo la recolección, el análisis y la interpretación sistemática de datos para avanzar el desarrollo y la diseminación de recomendaciones para el control y la prevención de las principales amenazas a la salud.

Desafortunadamente, la Dra. Deseda ha demostrado—en múltiples ocasiones—que no está a la altura de su puesto. Lo vimos durante el Huracán María y el manejo de los casos de leptospirosis. Es por eso que los miembros y amigos de la comunidad científica puertorriqueña exigimos su renuncia.

La Oficina de Epidemiología e Investigación liderada por la Dra. Deseda no tomó acción inmediata cuando el 30 de enero de 2020 la Organización Mundial de la Salud declaró una “Emergencia de Salud Pública de Interés Internacional” debido al nuevo coronavirus que causa COVID-19. Fue en aquel momento en el que la oficina de la Dra. Deseda, junto con el Departamento de Salud de Puerto Rico, debió ser pro-activa y comenzar a preparar todo lo que fuera necesario para tener laboratorios y hospitales listos para manejar y mitigar la pandemia de COVID-19.

El 26 de febrero, cuando se registraron en Puerto Rico los primeros casos de vigilancia por COVID-19, la Dra. Deseda afirmó que las personas aún no se habían puesto en cuarentena ni se les había hecho las pruebas por que "no cumplían criterios estrictos de viaje y no presentaban síntomas." Esto a pesar de informes científicos que concluyen que la transmisión del nuevo coronavirus se puede dar por personas asintomáticas. 

Tan recientemente como el 14 de marzo, la Dra. Deseda continuaba asegurando que la única vía de transmisión del virus es mediante contacto con una persona enferma. A pesar del número limitado de pruebas que se han hecho en Puerto Rico y de que hay amplia evidencia del contagio asintomático del virus, la Dra. Deseda se mantiene firme en que no hay casos “autóctonos” de contagio comunitario en Puerto Rico y que por tanto no es necesario hacer una proyección epidemiológica.

Al día de hoy, los criterios para aprobar la realización de la prueba de detección de COVID-19 son todavía demasiados estrictos y dificultan contabilizar realmente la propagación de COVID-19 en Puerto Rico.

Al evaluar las decisiones y expresiones públicas de la Dra. Carmen Deseda con relación a la pandemia de COVID-19, queda claro que no tiene la capacidad para velar por la salud de nuestro pueblo. Es por todo lo expuesto que los signatarios exigimos su renuncia inmediata. También le pedimos a la Hon. Gob. Wanda Vázquez Garced que en su lugar nombre a una epidemióloga o epidemiólogo con el peritaje necesario en salud pública y epidemiología, pero por sobre todo, alguien que priorice la ciencia y la evidencia en su toma de decisiones.

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