Un grupo de 42 estudiantes doctorales de la Escuela de Farmacia del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) de la Universidad de Puerto Rico reveló sus innovadores planes de negocio en los que las farmacias integran, como enfoque principal, el cuidado y la promoción de la salud de cada paciente.

Durante este año, los alumnos han llevado a cabo la planificación estratégica de un servicio que atiende una necesidad de salud en el escenario de una farmacia. Como parte de su currículo, la Escuela de Farmacia destaca la planificación estratégica y empresarial, con el fin de desarrollar y ampliar las posibilidades profesionales de los futuros farmacéuticos, al tiempo que promueven la reflexión y la búsqueda de soluciones a problemas relacionados a la salud pública.

“El primer semestre los estudiantes desarrollan el concepto y le tienen que demostrar a un panel de facultativos que su idea es viable. Durante el segundo semestre los estudiantes terminan de desarrollar la idea y al final producen un documento que es el plan de negocio. Este año quisimos que los estudiantes plasmaran de manera visual su idea”, destacó la doctora Nelly Conte, profesora y asesora académica de los ocho grupos conformados para desarrollar diferentes propuestas de negocio.

De acuerdo con el comunicado del RCM, cada grupo, conformado por seis estudiantes, presentó su plan en la Primera Exhibición de Carteles de Negocios, celebrada en el Museo de la Escuela de Farmacia del RCM. Los carteles fueron evaluados por facultativos, miembros de la comunidad académica y representantes de las asociaciones más importantes relacionadas a la profesión de farmacia, quienes conversaron con los alumnos sobre los detalles de cada propuesta.

“Esta experiencia le brinda a los estudiantes la oportunidad de desarrollar las competencias básicas que fomentan el emprendimiento, que a su vez pueden aplicar y continuar desarrollando una vez entren a la práctica profesional”, puntualizó la doctora Wanda Maldonado, decana de la Escuela de Farmacia.

En cada cartel los grupos identificaron las necesidades de la población específica a la que buscan atender, el servicio que proponen, cómo lograrían que el paciente transformara ese servicio en parte de su rutina diaria, cómo comunicarían y mercadearían el servicio. Este año los estudiantes doctorales trabajaron con temas relacionados a la salud de la mujer, la hipertensión, fallo cardiaco, osteoporosis, asma, entre otras condiciones.

“Este tipo de proyectos nos brinda la oportunidad de destacarnos como farmacéuticos en el cuidado de la salud del paciente y a la vez logramos el beneficio de todos los que estén involucrados en este proyecto de salud”, explicó la joven Zoriely Amador Ríos, estudiante de tercer año del grado doctoral de la Escuela de Farmacia.