Por Marcos Fernando López / Especial para El Nuevo Día endi.com No importa cuántas veces se caigan las llamadas en su teléfono celular o cuántas veces se congele su computadora, no la tire a la basura. Se merece una segunda oportunidad. Gracias a una iniciativa que por primera vez lanzó ayer la Autoridad de Desperdicios Sólidos (ADS) y Reciclaje del Norte, los celulares podrán ser reciclados y las computadoras reusadas por otras familias. Mientras los aparatos electrónicos se modernizan y sus precios disminuyen, los consumidores compran nuevos productos y desechan los obsoletos. Esto ha creado un problema de desperdicios electrónicos mundialmente. En Puerto Rico, la situación ha empeorado en los últimos años, según la ADS. Por ejemplo, en el 2004 cerca de 278 toneladas de desechos electrónicos llegaron a los rellenos sanitarios del País. Esa cifra se elevó a 693 toneladas en el 2006. Los desperdicios electrónicos, que son el desecho de mayor crecimiento en el País, son también una seria amenaza ambiental. Cuando se depositan en los vertederos sanitarios, el efecto de la lluvia y la humedad hace que liberen líquidos contaminantes (lixiviados) que contienen metales pesados como mercurio, plomo, cadmio, entre otros. Estos “jugos de la basura” contaminan valiosos ecosistemas así como recursos de agua con el potencial de afectar la salud humana. “Si no reciclaramos estos materiales, estos serían depositados en los vertederos del País. No tiene sentido que materiales que podemos usar para otros propósitos vayan al vertedero”, dijo Javier Quintana, director de la ADS. La amenaza que presenta el aumento de este tipo de desperdicio para los cuerpos de agua, en especial para el estuario de la Bahía de San Juan, propició que se iniciara este proyecto. Reciclaje del Norte se comprometió a recoger libre de costo los desechos electrónicos que lleguen a los centros de recogido en San Juan y Mayagüez. Las computadoras que sean funcionales, o que necesiten pocos arreglos, serán reparadas y vendidas luego a un costo reducido. Aunque las computadoras parecen ser obsoletas en poco tiempo, Marilyn de la Cruz, gerente de la empresa, aseguró que suelen tener una vida útil de unos cinco años. Por esto, hace un año la recicladora comenzó a operar una tienda en donde reparan computadoras para venderlas a familias de bajos recursos. Éstas se venden en entre $150 y $500. Dependiendo del equipo, tienen una garantía de 15 a 30 días, y una expectativa de durabilidad de tres años. Los demás aparatos serán desarmados y enviados a diferentes compañías en Estados Unidos en forma de plástico, cobre, oro y otros materiales. Reciclaje del Norte recibe una remuneración por exportar estos productos, aunque asegura no siempre este ingreso cubre los gastos operacionales. Al paso que evoluciona la tecnología, la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) estima que en los próximos cinco años 250 millones de computadoras se volverán obsoletas. Los teléfonos celulares son útiles por mucho menos tiempo, sólo unos dos años. Por esto, la EPA estima que cada año se desechan unos 130 millones de celulares.